
Comenzamos la clase viendo ejemplos del expresionismo arquitectónico, y con ellos como referente, comenzamos a dibujar con técnicas húmedas y a color. Con este dibujo debíamos empezar a tratar la perspectiva, es decir, que en nuestro dibujo se distinguiera aquello que estaba más cerca y más lejos del espectador.

Después de acabar este dibujo, empezamos otro utilizando también temperas y color. Tomamos de referencia unas imágenes en las que la perspectiva era lo principal.
Tras usar el color en los dos anteriores dibujos, pasamos a usar el blanco y negro. Tanto en el tercero como en el cuarto lo primordial era la colocación de elementos por delante de otros que dieran sensación de profundidad pero que estuvieran también unidos.
Finalmente partiendo de las imágenes de los proyectos del Guggenheim Bilbao que fueron descartados, hicimos el último dibujo. En mi caso, traté de usar esta vez un fondo negro y pintar sobre él, pues en los anteriores trabajos había hecho un fondo claro.